En el corazón de nuestra fe se encuentra La Cruz, un símbolo inefable que representa la eterna bondad de Dios. Es a través del sacrificio supremo en la cruz que experimentamos su compasión, lavándonos de nuestros pecados y dandonos la vida eterna. La Cruz no es simplemente una estructura de madera, sino un poderoso recordatorio de la alabanza
La Cruz: La Fuente del Amor de Dios
En la narrativa antigua, se menciona que el madero es símbolo del amor de Dios. Un amor, tan grande que entrega su ser por la salvación de la humanidad. La cruz se alza como prueba del sacrificio que Nuestro Señor hizo por cada uno del género humano. Al observar la cruz, nos transformamos con su sagrado amor. Un amor que nos abarca en l